Secuestran cocaína de máxima pureza valuada en poco más de $2 millones con un mensaje cifrado

Un operativo vehicular de rutina se convirtió en la madrugada de este martes en una persecución a toda velocidad que tuvo como escenario las calles de Pocito.

¿Qué pasó? un grupo de policiales federales estaban en ese control y al ver la sospechosa actitud de un automovilista intentaron obligarlo a que se parara. Pero nada de eso sucedió.

El sujeto que estaba detrás del volante aceleró y los esquivó. Su objetivo: llegar al radio céntrico de Pocito. Y lo hizo. Los efectivos lo siguieron de cerca hasta que finalmente lo alcanzaron.

Al requisar el vehículo descubrieron la evasiva decisión del conductor: consigo llevaba un cargamento de droga valuado en más de 2.000.000 de pesos, informaron fuentes de esa fuerza.

Los efectivos de la delegación local de la Policía Federal estaban realizando un control en Pocito que forma parte de una serie de operativos de prevención y seguridad de esa fuerza en distintos puntos de la provincia.

Mientras estaban en ese departamento, los uniformados vieron acercarse un VW Bora que, sospechosamente, se detuvo a unos metros y en la banquina.

Los policías vieron como el conductor enfiló en dirección hacia donde estaban ellos y comenzaron a hacerle señas para que se detuviera.

Pero el automovilista aceleró y los pasó rumbo con dirección al departamento. Los efectivos lo persiguieron y lograron alcanzarlo en el cruce de calle 11 entre Ruta Nacional 40 y avenida Joaquín Uñac (excalle Mendoza).

Los federales entrevistaron al sujeto (no fue identificado) y le pidieron tanto su documentación como la del rodado. El sospechoso afirmó no tener ningún documento suyo, ni del coche.

Allí, los efectivos pidieron directivas a la Justicia federal y así obtuvieron la venia para requisar al chofer y al rodado.

En esa requisa se enteraron que el conductor era de Pocito y al revisar el Bora, los uniformados encontraron un paquete con la leyenda "KTM".

Un análisis más detallado permitió establecer que era un "ladrillo" de cocaína de máxima pureza que pesaba 1 kilo, precisaron fuentes de esa fuerza.

Las mismas fuentes aseguraron que esa droga está valuada en 2.200.000 de pesos. Ahora, la mirada de los pesquisas y de la Justicia está en determinar qué rol cumplía el sospechoso apresado.