Russo toma el timón en Boca y comienza la "limpieza": varios jugadores no seguirán

La tercera etapa de Miguel Ángel Russo como técnico de Boca no comenzó con promesas, sino con decisiones. Con la premisa de poner orden en un vestuario que atravesó meses turbulentos, el entrenador ya avisó que hará una profunda depuración del plantel. Algunos nombres de peso ya están en la mira y desde el club dejaron en claro que están abiertos a recibir ofertas.

En medio de una ventana especial de mercado, habilitada solo para los equipos que disputarán el Mundial de Clubes, la dirigencia y el cuerpo técnico ya elaboraron una lista de jugadores que no seguirán. Entre ellos hay casos emblemáticos.

Uno es el de Luis Advíncula, que si bien compite por el lateral derecho con Lucas Blondel, tiene las valijas listas. En el cuerpo técnico consideran que su etapa en el club ya se agotó. En una situación similar está Marcelo Saracchi: su rendimiento irregular y algunos cruces con los hinchas lo convirtieron en una ficha de recambio. "Tiene poder de reventa", deslizan desde el club, pensando en sacarle rédito económico.

También se terminaría el ciclo de Sergio Romero. El arquero perdió terreno tras la lesión en su rodilla a comienzos de 2025, y la llegada de Agustín Marchesín lo dejó sin chances reales. "Esa fue su última aparición", se comenta en los pasillos de Brandsen 805 sobre sus partidos ante Tigre y Huracán.

La depuración no termina ahí. Cristian Lema, seguido de cerca por Belgrano, también podría emigrar. Esteban Rolón, sin minutos y con escasas oportunidades, está completamente fuera de los planes. Lo mismo sucede con Frank Fabra, histórico del club pero relegado desde hace tiempo, especialmente tras su lesión en octubre del año pasado.

La continuidad de otros futbolistas dependerá de los refuerzos. Si llega un nuevo delantero, Lucas Janson será uno de los que armará las valijas. El mismo destino podría tener Agustín Martegani, quien no logró consolidarse ni como interno ni como extremo. En cambio, Juan Barinaga podría quedarse para cubrir la inminente salida de Advíncula, salvo que Boca cierre la llegada de otro lateral.