El Gobierno nacional se apresta a cerrar el año con un nuevo acierto tras el triunfal arribo de la vacuna Sputnik V el pasado fin de semana. En el Congreso buscará hoy que la Cámara de Senadores convierta en ley el proyecto de interrupción voluntaria del embarazo, al tiempo que la Cámara de Diputados hará lo propio con la reforma jubilatoria.

La jornada la abrirán los diputados a las 11 cuando comiencen a debatir la nueva fórmula para calcular las jubilaciones que surge en un 50% de la variación salarial y en otro 50% de la recaudación. La oposición reclamó sin éxito que se tenga también en cuenta la inflación, como proponía la metodología que había impuesto el macrismo. 

De ratificarse el apoyo que el proyecto cosechó en comisión el Gobierno contará con los votos suficientes para conseguir la sanción definitiva de la ley.

En tanto, a las 16 la Cámara de Senadores comenzará a debatir el proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE). La sesión tendrá un final abierto, ya que los conteos preliminares arrojan un empate técnico donde cobrarán relevancia los senadores indecisos e incluso podría desempatar Cristina Kirchner.

Aunque en el oficialismo confían en su aprobación – había sido una promesa de campaña de Alberto Fernández – el conteo se encontró en un empate técnico. Si bien algunos senadores pedían cambios en la iniciativa el oficialismo negó esa posibilidad porque las modificaciones devolverían el proyecto a Diputados y, en cambio, apuestan a convencer con la promesa de incorporar modificaciones durante la reglamentación.

Entre los indecisos figuran el salteño Sergio "Oso" Leavy (Frente de Todos) que como diputado en 2018 votó en contra y ahora, tras una reunión con el Presidente, dijo que está reviendo su voto. El sector "celeste" sumaría también la baja de Carlos Menem, internado en delicado estado.

En tanto, el rionegrino Alberto Weretilneck se ha manifestado a favor, pero pidió modificar algunos aspectos del proyecto lo que pondría en duda su voto. Además aún no se pronunciaron la neuquina Lucila Crexell (Movimiento Popular Neuquino) y entrerriana Stella Maris Olalla (UCR).

El proyecto permite la interrupción voluntaria del embarazo hasta la semana 14 de gestación. Este plazo no regirá cuando el embarazo fuera producto de una violación, en los casos de menores de 13 años o si estuviera en riesgo la vida.

A su vez, la iniciativa habilita la objeción de conciencia de los profesionales que no están de acuerdo con esta práctica médica. En el caso de que una institución privada no cuente con profesionales para realizar la interrupción del embarazo deberá disponer la derivación a otra institución en la que sí pueda concretarse.

El Cronista